¿Sabes identificar y describir los hechos que muestren a la Tierra como un planeta cambiante, relacionándolos con los fenómenos que suceden en la actualidad?
Los cambios en el relieve
En 1795 el geólogo James Hutton publicó su libro Teoría de la Tierra, en el que defendía la idea de que la edad de nuestro planeta se medía en cientos o quizá miles de millones de años. A él se opusieron aquellos que creían que la Tierra solo tenía unos miles de años de edad. Charles Lyell también era geólogo y, tras leer el libro de Hutton, escribió Principios de geología.
En esta obra recopilaba y ampliaba las ideas de Hutton, desarrollando dos ideas importantes: el actualismo y el uniformismo.
Actualismo
¿Cómo se producen los acantilados? ¿Qué fuerzas los erosionan y los hacen retroceder? ¿Las fuerzas que actuaban en el pasado son las mismas que actúan ahora?
Lyell resumió este principio en la frase «el presente es la clave del pasado». Con esto quería dar a entender que los procesos que habían dado forma a la Tierra eran los mismos que aún se producen en la actualidad ( la erosión, el vulcanismo o la formación de relieves por plegamiento). Pero también es cierto que en la historia de la Tierra ha habido procesos y situaciones que actualmente ya no se producen, como el intenso bombardeo de meteoritos, la formación del núcleo metálico o la existencia de una atmósfera sin oxígeno.
Uniformismo
Lyell proponía que los procesos geológicos como la erosión y el levantamiento de los relieves eran muy lentos, y que si lograban resultados de gran magnitud, era porque actuaban durante larguísimos periodos de tiempo. Sin embargo, aunque la mayoría de los procesos geológicos se ajustan a esa manera de funcionar, también ha habido procesos catastróficos en la historia de nuestro planeta, como las épocas de vulcanismo muy intenso o las inundaciones catastróficas asociadas a la dinámica de las glaciaciones.
Veamos estos conceptos con un ejemplo, el Gran Cañón.
¿Qué fuerzas han dado forma al Gran Cañón? ¿ Durante cuánto tiempo? ¿Siguen actuando aún?
Las rocas que se pueden observar en el Gran Cañón van desde los 2000 millones de años de antigüedad de los esquistos situados en el fondo, hasta los 230 millones de años de las viejas piedras calizas de la parte superior. El río Colorado socavó el terreno durante millones de años, al mismo tiempo que la meseta del Colorado se elevaba. La mayor parte de los estratos fueron depositados en los mares cálidos poco profundos en la zona cercana a la costa. La gran altura de sus estratos (muchos de los cuales se formaron debajo del nivel del mar) se puede atribuir a la elevación de la meseta del Colorado que comenzó a producirse hace cerca de 65 millones de años. El proceso de elevación aumentó la velocidad de los ríos y su capacidad para atravesar la roca. El resultado de esta erosión son unas de las más completas columnas geológicas del planeta.
El río sigue en la actualidad erosionando activamente su cauce, sacando a la luz rocas cada vez más antiguas. Hace un millón de años la actividad volcánica depositó ceniza volcánica y lava sobre el área. Estas son las rocas más jóvenes del parque.
La edad de la Tierra
En 1862, el físico Lord Kelvin publicó cálculos que estimaban la edad de la Tierra en una banda entre 24 millones de años y 100 millones de años aproximadamente. Supuso que la Tierra se habría formado como una bola de roca fundida, y calculó el tiempo que demoró el proceso de enfriamiento hasta las temperaturas actuales. Los cálculos de Kelvin, pese a ser de millones de años, se quedaban cortos ya que no tuvo en cuenta una fuente de calor desconocida aún: la desintegración radiactiva.
Un experimento similar ya había sido realizado mucho antes por Georges Louis Leclerc, Conde de Buffon (1707-1788), obteniendo un edad menor para la Tierra, 180 000 años. Aunque inexactos, estos cálculos eran un gran avance, por la metodología experimental utilizada. Hasta la fecha, la edad estimada de la Tierra era de 4004 años. Estimación hecha por James Ussher, calculando las generaciones desde Adán y Eva hasta el nacimiento de Cristo.
Radiactividad y edad de las rocas
En 1903, Henri Becquerel, Pierre y Marie Curie recibieron el premio Nobel por el descubrimiento de la radiactividad. Esta forma de energía era una fuente de calor que lord Kelvin no había tenido en cuenta.
Rutherford fue el primero que propuso que la desintegración de los elementos radiactivos contenidos en los minerales, se podía utilizar como un reloj que permitía calcular la edad de las rocas. Los resultados fueron asombrosos: las rocas graníticas tenían en muchos casos una edad de más de mil millones de años. La geología y la biología habían encontrado por fin el tiempo necesario para el uniformismo de Lyell y para el evolucionismo de Darwin.
Gracias a la radiactividad se pudo averiguar la edad de las rocas, lo que permitió saber que la edad de la Tierra era de 4500 m.a.